Hay doce varales que escoltan tu llanto,
una rica corona que preside tu pena,
un puñal de oro que ahonda en tu duelo,
un suave rosario que anuda tus manos.
Hay cirios rizados que imitan orquídeas,
figuras de plata que llaman tu paso,
faldones de verde esperanza, gloria de marfil,
candelabros de cola, ¡al cielo con ella!
Hay nombres de Angustia y Tristeza,
Socorro, Amargura, el Mayor Dolor,
Candelaria, Las Aguas, Las Penas, Salud,
Caridad, Patrocinio, Piedad, de la Aurora.
Estrella, Victoria, de la O, Montserrat,
de la Palma, Rosario, Rocío, Guadalupe,
Soledad, Dulce Nombre, Refugio,
Ángeles, Buen Fin, Lágrimas, Valle.
Pero sobran los nombres, no hay advocaciones,
si vienes de frente, Esperanza, en Triana,
si alcanzo a mirarte, Macarena, en tu barrio.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
...ya no queda nada, ya empieza el temblequeo, ya está el corazón a mil por hora.
Muchas gracias.
Publicar un comentario